
Culiacán, Sin, a 18 de mayo del 2025.- En tiempos donde la política se mueve más con cálculos que con convicciones, resulta significativo que un actor como Gerardo Vargas Landeros salga a dar un mensaje claro, directo y sereno. En medio del ruido y las especulaciones, apuesta por la calma, la legalidad y el respeto institucional.
Un mensaje en el momento clave…
El comunicado difundido por Gerardo Vargas Landeros llega en un contexto marcado por señalamientos políticos, procesos legales en curso y, sobre todo, una narrativa oficial que ha buscado desacreditarlo. Sin embargo, lejos de responder con confrontación, optó por un tono mesurado, con un mensaje claro: “mantenerse sereno, con la frente en alto y los pies sobre la tierra”.
Vargas Landeros reafirma su compromiso con el municipio de Ahome, a pesar de no estar al frente de la alcaldía. Su mensaje no tiene el tono de quien se despide, sino el de quien permanece firme. Habla de responsabilidad y de respeto a la institucionalidad, pero sobre todo, de confianza en el pueblo al que ha servido.
Respeto al proceso, pero sin ceder.
A diferencia de otros casos donde los implicados gritan persecución o se victimizan, el exalcalde señala que está atento al proceso legal, que lo respeta y que lo atenderá por las vías institucionales. Una postura que busca proyectar confianza y tranquilidad, tanto hacia la opinión pública como hacia sus simpatizantes.
Una respuesta a quienes lo apoyan.
En su comunicado, Vargas Landeros agradece a quienes le han mostrado apoyo y solidaridad. Es un reconocimiento a la ciudadanía, a los liderazgos locales y a quienes han visto en su gestión resultados visibles. No es una postura de defensa, sino de reafirmación: cree en Ahome y en su gente, y lo dice con claridad.
Comunicación responsable frente a la polarización.
En tiempos donde todo se exacerba en redes sociales y donde los procesos judiciales se mezclan con la opinión pública, el exalcalde apuesta por informar “con respeto y con responsabilidad”. No lanza acusaciones, no señala culpables, ni cae en provocaciones. Se muestra sereno, como si supiera que todo se acomodará a su tiempo.
El mensaje de Gerardo Vargas Landeros parece decir más por lo que calla que por lo que dice. En lugar de pelear mediáticamente, decide esperar, confiar y respetar. Habrá que ver si esa serenidad es suficiente para enfrentar los embates políticos, o si estamos apenas viendo el inicio de una disputa más grande. Por ahora, su postura es clara: firmeza, calma y fe en su pueblo.