Culiacán, Sinaloa .– La capital sinaloense vivió este domingo una jornada marcada por la unidad y el hartazgo ciudadano frente a la violencia. Miles de personas se congregaron en las escalinatas de La Lomita para iniciar una caminata que concluyó frente a la Catedral de Culiacán, donde se elevó un mismo grito: paz y justicia.
Con pancartas y consignas, familias enteras, jóvenes, adultos mayores y organizaciones civiles recorrieron las calles del centro histórico portando mantas con mensajes como “Queremos Paz” y “Merecemos vivir sin miedo”. La multitud recordó a las autoridades que la inseguridad ha arrebatado la tranquilidad de la sociedad desde hace más de un año, y exigió acciones contundentes contra la criminalidad.
Durante el recorrido, la presencia de niños, estudiantes y trabajadores reflejó que el anhelo de seguridad atraviesa a todas las generaciones. La caminata fue pacífica, pero cargada de simbolismo: el eco de las voces se mezclaba con los rezos y las expresiones de indignación que, al llegar a la Catedral, se transformaron en un momento de silencio y reflexión.
La alta participación sorprendió a propios y extraños, evidenciando que la ciudadanía está dispuesta a organizarse y manifestarse para recuperar la armonía en las calles del estado. Más que una protesta, la marcha se convirtió en un llamado colectivo a las autoridades para que redoblen esfuerzos y devuelvan a Sinaloa la paz que sus habitantes merecen.
